El impacto en la salud mental tras encierro prolongado
Al momento de hablar sobre los impactos de una pandemia, mayormente nos enfocamos en las consecuencias físicas y surgen algunas dudas: ¿De qué forma reaccionará mi cuerpo si me infectara de Covid-19? ¿El virus tendrá secuelas a largo plazo? Dejando de lado nuestra salud mental.
Al tomar la acción de prevenir el contagio, realizar cuarentena y/o confinamiento, trae consecuencias psicológicas desde el primer día, las que pueden generar algún tipo de incapacidad.
Los días de encierro debido a la crisis sanitaria, traen diferentes efectos en el estado mental, los que repercuten en la población: dificultad para conciliar el sueño, ansiedad, cambios de ánimo (pasar de la pena a la irritabilidad), incertidumbre respecto al futuro provocando miedo. Éstos estados pueden ser llevaderos a corto plazo, sin embargo, ¿Qué ocurre cuando se prolongan en el tiempo?
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 4% de la población del mundo podría sufrir trastornos mentales severos derivados de la crisis por el Covid, mientras que entre el 15% y 20% podrían experimentar trastornos leves a moderados.
El Núcleo Milenio en Desarrollo Social y la Universidad de Chile, realizaron la tercera versión del Termómetro Social (junio 2020) para evaluar el impacto de la pandemia en la población chilena. Concluyendo que la mitad de los participantes declaró que su estado de ánimo está mucho más acentuado a la desmotivación previo a las medidas de aislamiento.
Lo primordial es descubrir si estos efectos secundarios en nuestra salud mental están interfiriendo en el funcionamiento habitual de nuestros días. Es importante detectar nuestra estabilidad emocional y si nuestras relaciones familiares e interpersonales están siendo sanas. Si existe lo contrario, es necesario tomar acciones y consultar a un especialista en busca de ayuda.
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Psicóloga Paula Ruiz Vargas